CIUDADANOS
¡Primero vamos a aprendamos los conceptos básicos de la sostenibilidad ambiental que nos afectan como ciudadanos!
- Residuos
Son todas las cosas que ya no necesitamos y que tiramos, como papeles, plásticos, restos de comida, envases, entre otros. Es importante gestionarlos bien para cuidar nuestro entorno y reducir la contaminación. Cuando hablamos de residuos generados en entornos urbanos o asimilable a urbanos, estamos hablando de Residuos Sólidos Urbanos (R.S.U).
- Energía
Es la fuerza o capacidad que tenemos para realizar tareas, como encender la luz, cocinar, o movernos en coche. Usar energía de manera responsable ayuda a cuidar el medio ambiente y a ahorrar recursos.
- Movilidad
Es la forma en que nos desplazamos de un lugar a otro, ya sea caminando, en bicicleta, en coche, en autobús o en tren. Optar por medios de transporte sostenibles ayuda a reducir la contaminación y el tráfico.
- Huella de Carbono
Es la cantidad de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono, que se emiten a la atmósfera por nuestras acciones, como usar el coche o consumir energía. Reducir nuestra huella ayuda a cuidar el clima del planeta. - Huella Hídrica. Es la cantidad de agua que usamos para producir lo que consumimos, como alimentos, ropa o productos electrónicos. Ser conscientes de nuestra huella hídrica nos ayuda a cuidar este recurso tan valioso y a usarlo de manera responsable
¡Ahora vamos a ayudarte a reducir tu huella ambiental en nuestro municipio!
Gestión Sostenible de los Residuos
¿Qué significa una gestión respetuosa y sostenibles de los residuos?
Que un ciudadano haga una gestión respetuosa y sostenible de los residuos significa que se preocupa por qué pasa con la basura que genera y actúa de forma que se minimice el impacto negativo en el medio ambiente, integrando el concepto de “Las tres Erres” en su vida cotidiana.
Reutiliza:
Apuesta por lo reutilizable: Elige botellas de agua reutilizables, bolsas de tela para la compra, envases de vidrio en lugar de plástico de un solo uso. ¡Evita generar el residuo!
Dona o intercambia lo que ya no usas: Antes de tirar ropa, libros, muebles, considera donarlos a organizaciones benéficas o intercambiarlos con vecinos. ¡Alarga su vida útil!
También, puedes apostar por hacer compras de productos de segunda mano.
Recicla:
Separa previamente tus residuos en casa:
Es muy importante saber a qué contenedor tirar tu basura. Clasifica correctamente tus residuos caseros, separando principalmente los envases de los restos orgánicos y el papel y cartón.
Para residuos voluminosos y/o que no puedan ser desechados en los contenedores habituales, recuerda hacer uso de los Puntos Limpios.
Hacer un uso adecuado de los contenedores de la vía pública y de los establecimientos: Son cada vez más los lugares de frecuente tránsito de personas que establecen recogida selectiva de residuos, por lo que es responsabilidad del ciudadano hacer uso de los contenedores de reciclaje .
Reduce:
Repara antes de desechar: Intenta arreglar pequeños electrodomésticos, ropa o juguetes en lugar de tirarlos directamente. ¡Fomenta la cultura de la reparación!
Compra a granel y con menos envase: Opta por productos que se vendan a granel o con envases más grandes para reducir la cantidad de residuos generados por unidad. ¡Y recuerda salir de casa con tu propia bolsa!
Gestión sostenible de la Energía
¿Qué significar hacer un uso eficiente de la energía en casa?
Utilizar la menor cantidad de energía necesaria para realizar las actividades cotidianas, sin sacrificar el confort, y así reducir el consumo de recursos naturales y las emisiones de gases de efecto invernadero y así reducir también el coste de la luz en el hogar.
Gestiona tu iluminación:
Aprovecha al máximo la luz del día. Abre cortinas y persianas, y organiza tus espacios para que la luz natural llegue a todos los rincones.
¡Menos necesidad de encender la luz!
Utiliza bombillas de bajo consumo para que la iluminación de tu hogar genere un menor gasto económico
Uso responsable de la climatización:
Utiliza la calefacción y el aire acondicionado de forma consciente. Ajusta el termostato a temperaturas razonables entre 23 y 25 grados y ventila naturalmente cuando sea posible.
Elige electrodomésticos eficientes:
Cuando reemplaces un electrodoméstico, opta por aquellos con etiquetas de eficiencia energética A o superior.
A largo plazo, ahorras energía y dinero.
Movilidad Sostenible
¿Por qué elegir una movilidad sostenible?
La quema de combustibles fósiles para el transporte por carretera, aéreo, marítimo son fuentes importantes de CO2. El uso diario de vehículos impacta directamente en la atmósfera mediante la emisión de (GEI).
Camina, pedalea o usa el transporte público:
Prioriza estos medios para tus desplazamientos diarios, especialmente para distancias cortas. ¡Es bueno para tu salud y para el planeta!
Comparte coche:
Si tienes que usar el coche, organiza viajes compartidos con vecinos, amigos o compañeros de trabajo que vayan al mismo destino.
Reduce la compra por internet o elige compañías que utilicen medios de transporte sostenible: Las grandes industrias de paquetería generan unas altas emisiones de GEI. Optar por comprar en comercios evita generar esa huella.
Huella de Carbono
¿Qué es la Huella de Carbono de un ciudadano?
Imagina que cada vez que hacemos algo (encender una luz, conducir el coche, comprar una camiseta, o incluso lo que comemos), estamos dejando una «marca» invisible en el planeta. Esta marca es la cantidad de gases de efecto invernadero (como el dióxido de carbono, el famoso CO2) que se liberan a la atmósfera debido a nuestras actividades.
Piensa en esos gases como una manta que envuelve la Tierra, atrapando el calor y haciendo que la temperatura suba. Esto es lo que conocemos como cambio climático.
Entonces, tu Huella de Carbono es, simplemente, la cantidad total de esos gases que generas directamente o indirectamente con tu estilo de vida. Cuanto más grande sea tu huella, más contribuyes al cambio climático.
¡La buena noticia es que puedes reducir tu Huella de Carbono!
Cada pequeño cambio en tu rutina puede marcar una gran diferencia para nuestro Alhaurín el Grande y para el planeta.
¡Ahora vamos a ayudarte a reducir tu huella ambiental en nuestro municipio!
Muévete de forma inteligente:
La forma en que nos movemos tiene un impacto muy directo en la cantidad de gases de efecto invernadero que liberamos a la atmósfera. Sigue nuestros consejos de movilidad, camina o usa la bicicleta: Para ir a la panadería, al colegio de los niños, o a ver a un amigo. ¡Es saludable para ti y para el planeta!
- Usa el transporte público: Si tienes que ir más lejos, el autobús es una excelente opción.
- Comparte coche: Si compartes trayectos con vecinos o compañeros, reduciréis las emisiones a la mitad.
- Conduce eficientemente: Evita acelerones y frenazos bruscos. ¡Ahorrarás combustible y CO2!
Sé un «ahorrador» de energía en casa:
Aquí en España, una parte importante de la electricidad que consumimos se genera quemando combustibles fósiles como el carbón, el gas natural y el petróleo.
Cuando estos combustibles se queman en las centrales eléctricas (o en los motores de los coches, etc.), liberan a la atmósfera grandes cantidades de gases de efecto invernadero, principalmente dióxido de carbono (CO2). Estos gases son los que atrapan el calor en nuestra atmósfera y provocan el cambio climático.
Cada vez que ahorras energía, estás mandando una señal:
«¡No necesitamos que se quemen tantos combustibles fósiles para cubrir mi consumo!». Y eso se traduce directamente en una reducción de las emisiones de gases que calientan nuestro planeta.
Elige lo que comes y compras con cabeza:
Prioriza lo local y de temporada: Los productos que vienen de lejos o fuera de temporada necesitan más transporte y energía para su producción. ¡Apoya a los agricultores de Alhaurín el Grande y de la zona!
Reduce el consumo de carne (especialmente roja): La ganadería produce una cantidad significativa de gases de efecto invernadero. No se trata de eliminarla, sino de reducirla.
Evita el desperdicio de alimentos: Planifica tus comidas, compra con lista y aprovecha las sobras. Cuando la comida se tira y se descompone, genera metano, otro gas de efecto invernadero muy potente.
Consume menos, elige mejor: Antes de comprar algo nuevo, pregúntate si realmente lo necesitas. Prefiere productos duraderos, de segunda mano o reciclados.
Gestiona tus residuos (¡recicla!):
Cuando hablamos de «gestionar bien tus residuos» y «reciclar», estamos hablando de un conjunto de acciones que tienen un impacto directo y positivo en la reducción de esa «marca» de gases de efecto invernadero que dejamos en el planeta (tu Huella de Carbono).
Separa correctamente: Asegúrate de tirar cada cosa en su contenedor (amarillo, azul, verde, orgánico). Reciclar ahorra energía y reduce la necesidad de fabricar cosas nuevas desde cero.
Composta: Si tienes jardín o macetas, puedes compostar tus restos orgánicos. ¡Es un excelente abono y reduce los residuos en el vertedero!
Reduce tu Huella Hídrica
Imagina que, igual que dejas una «huella» de carbono con la energía, también dejas una «huella» con el agua que utilizas.
La huella hídrica mide la cantidad total de agua dulce que se utiliza para producir los bienes y servicios que consumes. Esto incluye el agua que usas directamente en casa (para ducharte, beber, lavar) y también el agua que se necesita para cultivar los alimentos que comes, fabricar la ropa que vistes o producir los aparatos que usas. Por eso, cuando hablamos de reducir tu huella hídrica
Ahorro de Agua en el Hogar:
Cierra el grifo al lavarte los dientes, dúchate en lugar de bañarte, repara fugas.
Consumo Responsable de Agua: Elige productos que requieran menos agua en su producción.
Cuidado de Fuentes de Agua: No viertas residuos contaminantes por el desagüe ¡La depuradora de tu ciudad tendrá que trabajar más duro para eliminarlo y esto generaría un mayor consumo de energía en la misma!
Elige productos con menor impacto hídrico:
Aunque es más difícil de saber directamente, informarse sobre cómo se producen ciertos bienes puede ayudar a tomar decisiones más conscientes.
No malgastes agua potable: Si ve una fuga de agua en la calle, ¡avise al ayuntamiento!